El telecabina Panoramabahn reemplaza un telesilla de tres plazas y un telesquí, asumiendo una doble función de conexión, en subida y bajada. Un aspecto particularmente delicado era representado por la limitada disponibilidad de espacio en la estación inferior y por las restricciones en materia de contaminación acústica, en relación con el proyecto previsto de construcción de un nuevo restaurante alpino en el techo del almacén de la estación superior motriz. La instalación es utilizada en invierno por los esquiadores y los amantes del snowboard, en verano por las familias con carritos y por quienes practican el ciclismo de montaña.